En el último mes el precio del aceite virgen extra se situó en 4,06 euros el kilo y el lampante (de peor calidad), a 3,87 euros por kilo
El precio del aceite de oliva, un producto esencial en la dieta mediterránea, se ha disparado de tal forma que es difícil encontrar una botella de litro por menos de 4,50 euros en los supermercados. Según los últimos datos, en el último mes el precio del aceite virgen extra se situó en 4,06 euros el kilo y el lampante (de peor calidad), a 3,87 euros por kilo.
Y si en España los precios del aceite están por las nubes, en el caso de Italia es mucho más preocupante. En este país los precios son casi un 50% más altos que en el nuestro, llegando a alcanzar el virgen extra los 5,91 euros el kilo; el virgen los 3,99 euros y el lampante 3,24 euros, durante el mes de mayo. Por otro lado, en Grecia el precio del aceite de mayor calidad se sitúa en los 3,83 y en Túnez oscila entre los 4,25 y los 4,53 euros, según los datos de ISMEA.
Esta circunstancia está teniendo serias consecuencias. Según la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA), las ventas de aceite de oliva han bajado en un 30%, incrementándose de esta forma el de girasol, que resulta mucho más barato. De hecho, el aceite de girasol ha bajado de precio considerablemente: 1,5 euros la botella, aproximadamente.