Andalucía ha registrado en los primeros ocho meses de campaña -de octubre del 2016 a junio del 2017- un récord en exportaciones de aceite de oliva con un aumento del 31 % respecto al mismo periodo del año anterior.
Así lo ha informado el consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez, durante la inauguración ayer en Bedmar (Jaén) del curso titulado ‘Etiquetado, marca y denominaciones geográficas en el sector de los aceites de oliva: estrategias comerciales de la calidad diferenciada’.
Sánchez ha concretado que Andalucía ha comercializado en el extranjero más de 563.000 toneladas de aceite de oliva, con un valor superior a 2.000 millones de euros.
Para el consejero, estos datos dan “una muestra del dinamismo” de las empresas y cooperativas andaluzas, que en su opinión “están haciendo las cosas bien“.
Aún así, ha insistido en que la región no puede permitirse “dormirse en los laureles de los buenos precios y las ventajas competitivas, ya que la próxima campaña se podría recuperar el nivel global de producción y cada vez más países están interesados en participar en este interesante mercado”.
“Oportunidad”
Es por eso por lo que ha llamado a “aprovechar esta oportunidad para fortalecer estrategias comerciales y consolidar nuestro liderazgo en los mercados exteriores“, “una presencia que los consumidores tienen que asociar al verdadero origen del aceite de oliva, con marcas que reflejen que lo mejor de nuestra tierra y sobre todo que vayamos construyéndolo con valor”, ha añadido.
Asimismo, ha precisado que es a través de las denominaciones geográficas donde se debe dar un valor añadido al producto, para lo que es necesario “unidad” y “una buena estrategia comercial” de cara a mantener el crecimiento de las ventas fuera de la UE.
Según estudios de la Comisión Europea, aportados por el consejero, el mayor crecimiento en el consumo vendrá de los países de fuera de la UE, con un aumento estimado de las exportaciones del 45 % hasta el 2026.
Próximo objetivo, Canadá
Por ello, para el consejero “debemos dirigir buena parte de los esfuerzos comerciales a países como Canadá, con un alto poder adquisitivo y unas importaciones de más de 30.000 toneladas de aceite de oliva, donde España todavía no lidera la cuota de mercado“.
Las exportaciones de aceite de oliva español a Canadá han aumentado un 106 % entre 2012 y 2016, una campaña en la que el valor de las exportaciones alcanzó los 7,8 millones de euros, según detalla el informe del Mercado de Aceite de Oliva en Canadá que publica el Instituto de Comercio Exterior (ICEX).
Aunque en el último ejercicio se aprecia un ligero descenso del 15 % respecto a 2015, las perspectivas de este mercado es que siga creciendo pese al aumento de precios, tanto de los aceites de gama media como de gama alta.