Entrevista con Cinta Faiges Consejera Delegada de F.Faiges
El nombre de Faiges no es tan conocido como otras marcas en el mundo del aceite de oliva y los aceites vegetales y, sin embargo, lleva muchos años entre las líderes del sector. ¿Qué volumen y posición presenta en el mercado de aceites de oliva y vegetales?
En el conjunto del mercado de aceites en España nos encontramos en la cuarta posición, con un 6,84% de la cuota de mercado. En olivas, nuestra fuerza está en el aceite de oliva refinado, sector en el que ocupamos las primeras posiciones con un porcentaje del 17,88%. En cuanto a los aceites vegetales y, en especial, el de girasol, nuestro producto líder, estamos en tercer lugar con un 12,46% del mercado.
Además de fabricar para grandes grupos de Distribución, ¿estáis apostando por vuestras propias marcas con diferentes formatos y más innovación?
Sí. Nuestra principal marca, Abaco, acaba de sacar al mercado Abaco Oro, una botella de 630 ml. con un diseño exclusivo y un tapón antigoteo. Es un aceite virgen extra ideal para aliñar los platos una vez ya los tenemos en la mesa ya que, gracias a su alta calidad y a la extracción en frío, el tapón permanece completamente limpio. Además, el envase está cubierto por una etiqueta sleeve (de manga retráctil) que lo protege del sol y garantiza la calidad del aceite.
¿Qué innovaciones presentáis en el mercado?
Abaco sacará, en poco tiempo, diferentes productos nuevos y que se engloban en tres grandes segmentos: En la Gama gourmet de la mano del chef Fran López, con dos estrellas Michelin, presentaremos unos aceites especiales para diferentes platos; otra gama de aceite saludable cuyo primer producto actuará como un antiinflamatorio natural porque tendrá propiedades similares a las del ibuprofeno, Y un gama cosmética en la que estamos trabajando para desarrollar aceites destinados al cuidado de la piel y el cabello.
¿Qué proyectos industriales más destacados tenéis en marcha en el actual año 2017, sobre todo en vuestra planta de Daimiel?
Hemos comprado el terreno colindante a nuestras instalaciones en Daimiel, que nos permite ganar 30.000 m2. Paralelamente, con la puesta en marcha en 2012 de la planta de Los Navalmorales, nuestra tercera fábrica, debemos estudiar tranquilamente las necesidades del mercado y adecuarnos a la demanda del consumidor final.
En los actuales niveles de precios en origen ¿resulta más complicado el abastecimiento y más en una campaña donde la exportación se llevará muchos millones de litros ante la mala campaña italiana?
Si, resulta cada día más complicado, ya que el mercado está en plena globalización. Además, la gran especulación que hay en el sector hace muy difícil seguir la tendencia natural del aceite. El mercado ha cambiado muchísimo en pocos años y ahora prever las oscilaciones del precio del aceite durante la cosecha resulta extremadamente difícil.